Que si el pasado fuera bueno, lo llamarían presente.

Recordar, una y otra, y otra vez. Todo lo que pudo y no fue. Quizá fueses tú y tu orgullo , yo y mi miedo o puede que fuese porque ninguna de las dos habíamos cambiado nada, no lo creímos necesario supongo.

No voi a  explicar lo que teníamos, ni siquiera lo que pasó para que acabara ,ya lo sabes creo. En una ocasión me dijiste que era parecido a una playa sin arena, a mirar por la ventana y no ver un bonito paisaje verde, a un borracho sin su botella, a un niño sin su madre, a un día sin sol o a bailar bajo la lluvia sin banda sonora, ¿que fue de eso? pues que todo ha cambiado ¿no?. Ahora las playas son de asfalto, yo me asomo a la ventana y solo veo edificios y carreteras, el verde ya se perdió ¿recuerdas?. Ahora estar limpio es la moda y hay muchos niños huérfanos. El sol tiene fecha de caducidad y aquí hace tiempo que no llueve.

Te jodí, me jodiste, nos hicimos daño, me destrocé. Todo recuerdos, culpas, verlo venir. Pupilas rotas de tanto mirar atrás, y es que ya habla más de mí lo que callo que lo que digo. Puede que ese fuese  el problema, quién sabe,  callar hasta que todo me consume. 
Así hasta que mis párpados deciden ceder, duermo; al fin. Con la esperanza de que pase el tiempo rápido, sabiendo que cuando amanezca, esto no irá mejor, no será distinto, algo seguirá faltando, el dolor seguirá ahí, en el mismo sitio porque al fin y al cabo tu no estarás mirándome cuándo despierte . Es tarde para cambiarlo todo, demasiadas heridas, lo sé. 

Pero, piénsalo, ya he pasado lo peor. No estas ni estarás más y obviamente no habrá nunca nadie como tú, pero tampoco nadie que sepa hacerte sentir cómo lo hacía yo; nadie sabrá entender esos pequeños detalles y mucho menos alguien como ellos. No sabrán hacerte reír hasta dejarte sin aliento o al menos no como lo hacía yo. 
¿Que me derrumbaré? Claro, ya lo hice; pero que sé yo, me considero fuerte y si no lo soy, ya aprenderé. A mi desde pequeñita me decían que siempre que algo acaba, algo empieza y en ello estoy, en intentar darme cuenta de que aunque sea el fin de todo esto no es el fin del mundo. Que no me sobran los motivos, ni mucho menos las ganas, pero los hay que es lo importante.